Page 65 - El enclavamiento hidráulico de Algodor

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bien, del ilustre autor de “El escándalo”, éstas se quedan sagios. Pero de ilusión también ha vivido el ferrocarril, y
chiquitas frente a los versos de vate anónimo dedicados a Algodor -campos de Algodor, nubes de Algodor...- le
“Al Excmo. Sr. D. José de Salamanca en la inauguración corresponde la parte alícuota de tales ensoñaciones. Y en
del ferrocarril de Castillejo a Toledo, construído a sus ello andamos.
expensas”. Entre cursis y ditirámbicos, desgranamos una
porción de ellos: Entre Aranjuez y Toledo

En triste desamparo como viuda Algodor tenía que ser el segundo o tercer estadio en el
que ha perdido su hogar, Toledo yace. proyecto de comunicación por vía ferrea entre Madrid y
El tiempo de sus galas la desnuda Toledo que don José de Salamanca se adjudicó (julio de
y en polvo sus tesoros ya deshace (...). 1855) en concesión que apenas tres años después era
Tú lo sabes, patricio generoso, una realidad actuante. La Reina Isabel II, familiarizada
y la tiendes la mano protectora: con el tren desde 1851 (línea Madrid-Aranjuez, etc.) lo
construyes un camino; poderoso inauguraba el 12 de junio de 1858. Punto intermedio,
a la fiebre fatal que la devora, basculante entre el Real Sitio y la capital toledana,
propinas un remedio prodigioso Algodor comienza a significar algo más en el mapa
-la ciencia del dinero salvadora- nuevo que propicia la extensión de los ferrocarriles en
y, abriéndola tus arcas sin medida, nuestro país. ¿Y de qué modo se ‘estrenó’ este pequeño
nuevo ser la concedes, nueva vida”. núcleo sufragáneo de Aranjuez en la operación ferrovia-
ria? Pues muy posiblemente con la hazaña protagoniza-
A no dudar, bien suena eso de la “ciencia salvadora del da por el promotor Salamanca. Éste, cual Juan Palomo
dinero” ...Hoy no hallamos esa alegría, ese fervor, ese de la ocasión, ganó los 70.000 duros que el
optimismo con que nuestros mayores, fueran ya cultos ya Ayuntamiento había prometido a quien guiara la pri-
iletrados, al celebrar el advenimiento de un nuevo ferro- mera locomotora hasta las puertas de la Ciudad
carril. Hoy nadie compararía, de forma tan conmovedo- Imperial. Dicho y hecho: el 2 de junio -es decir, diez
ra, a la postrada antigua Corte hispana con una viuda a días antes de la apertura oficial- ya se adelantaba el
la que pone casa un marqués desinteresado; ni, como “Montecristo español” a recoger, de manos del alcalde,
don P.A. de A., ofrendaría a una tierra tan lisonjeros pre- el sustancioso trofeo, cabalgando una de aquellas poco

Detalles de la estación del mismo estilo de Narciso Clavería