Obligación de la Compañía de Tarragona a Barcelona y Francia
Compañía de los Ferrocarriles de Tarragona a Barcelona y Francia = Compagnie des Chemins de Fer de Tarragone a Barcelone et France: Obligation/ G. Fraipont; Huyot.- [Barcelona]:[s.n.], 1887 (Imp.Suc. Ramírez y Cía).
[350] estampas: grab. lit.; 430 x 500 mm.
AHF-MFM (Archivo Histórico Ferroviario. Museo del Ferrocarril de Madrid) Signatura: O-0022
El AHF conserva una interesante colección de acciones y obligaciones ferroviarias emitidas por las compañías ferroviarias anteriores a Renfe. Es el caso de esta obligación emitida por la Compañía de los Ferrocarriles de Tarragona a Barcelona y Francia (TBF) en el año 1887.
Tanto las acciones como las obligaciones son títulos de crédito que nacen a la luz de las sociedades de capital. Sin embargo, los requisitos y la función económica de cada documento son diferentes. En el caso de la obligación, su legítimo poseedor se acredita como acreedor de la sociedad emisora ya que el título representa parte de un crédito colectivo otorgado a esa sociedad. Normalmente las sociedades anónimas recurrían a la captación de grandes sumas de dinero para atender necesidades determinadas como podría ser su crecimiento, el pago de deudas o desarrollos especiales y las obligaciones son los títulos de crédito que documentan crediticiamente grandes sumas de capital. Estos documentos pueden ser nominativos o, excepcionalmente al portador y, contrariamente a las acciones no otorgaban a su poseedor ningún derecho a participar de la administración de la sociedad.
En el caso de la Compañía TBF la emisión de estas obligaciones responde a dos proyectos estratégicos que la sociedad presentó a su Consejo de Administración en marzo de 1886, la firma de un contrato con la Compañía de los Ferrocarriles Directos de Madrid y Zaragoza a Barcelona, lo que les permitió tener una segunda vía en la línea de Tarragona; y por otro lado, el plan para la construcción de una línea que, partiendo de Balaguer, pasara por Igualada para empalmar con la línea de Tarragona, entre las estaciones de San Saturnino y Gélida. Para hacer frente a lo anterior, la Junta General de Accionistas celebrada el 14 de noviembre de 1886 autorizó a la Compañía a emitir 20.000 obligaciones de la sociedad.
En este caso se trata de la obligación número 082516 del 6 de abril de 1887, que incluye los cupones de los números 31 al 45. El propio documento aporta información importante para los acreedores, como el valor nominal de cada obligación, establecido en 500 pesetas cada una o, el valor del interés anual que se establecía en 15 pesetas, pagadero por semestres vencidos en 1 de abril y 1 de octubre de cada año. Los derechos patrimoniales se ejercían con la entrega de los cupones correspondientes y sólo podían ser cobrados por el legítimo propietario del título o su representante legal. La parte trasera de la obligación incluye el cuadro de amortización de las obligaciones que se iniciaba en abril de 1888 y finalizaba en abril de 1977, este documento en concreto incluye un sello anulando su valor junto con el sello de la compañía TBF.
En la obligación se especificaba además que la Compañía ponía como garantía hipotecaria para el pago de las obligaciones, la línea de Valls a Villanueva y Barcelona y la sección de Roda a Reus de la línea general de Madrid y Zaragoza a Barcelona.
En la parte inferior aparecen las firmas de los cargos de la Compañía, presidente, Federico Marcet Vidal, del director gerente, Claudio Planás, y del secretario, Miguel Victoriano Amer.
Desde el punto formal podemos indicar que el método empleado para su impresión fue el grabado litográfico, un tipo de impresión permitía combinar texto e imagen reduciendo costes y tiempo de proceso. La ornamentación incluye una orla rectangular sobre fondo naranja, con los escudos de Madrid, Zaragoza y Barcelona. Rodeando la caja central del texto aparecen diversas ilustraciones con vistas panorámicas de instalaciones fijas, con especial predilección por túneles y viaductos ferroviarios, y diversas herramientas de trabajo. La imagen central superior lo ocupa una locomotora de vapor, símbolo del progreso económico del siglo XIX, aunque se trata de un tipo de locomotora poco frecuente en nuestros ferrocarriles. Incluye además un sello de 2 pesetas en el margen izquierdo.