La Dirección de Operaciones e Ingeniería de la Red Convencional de Adif y el equipo de restauración del MFM realizaron diversas reparaciones en el enclavamiento hidráulico de Algodor, el pasado 12 de mayo. Estas reparaciones se centraron en las partes hidráulicas, mecánicas y eléctricas del enclavamiento, tanto las que se encuentran en el edificio como las del puente de señales.

En concreto, el trabajo realizado se concentró en engrasar las partes mecánicas de las señales y reparar uno de los finales de carrera. Pero el trabajo más difícil fue la sustitución de diversas juntas de cuero (ya muy desgastadas), sobre todo en la bomba  central, encargada de distribuir el agua a presión por todo el circuito. Con estas medidas resulta posible ponerlo en funcionamiento.

La construcción del enclavamiento hidráulico se inició en 1927 y su instalación en la estación de Algodor data de 1929, permaneciendo en funcionamiento hasta julio del año 2000. En ese año se decidió su traslado al Museo del Ferrocarril, una vez que se había determinado su sustitución en Algodor por otro de tecnología electrónica. Esta pieza única del patrimonio industrial ferroviario fue cedida al Museo de Delicias y en él se conserva desde entonces en una caseta de enclavamiento construida ad hoc con las mismas características arquitectónicas que la original. De la instalación en Algodor se rescató todo lo esencial para que desde la mesa de palancas (en la planta superior de la caseta) cualquier visitante del Museo pueda realizar los movimientos oportunos de apertura de señales de salida y señal direccional.

Tanto el enclavamiento como el puente de señales constituyen uno de los elementos indispensables del Museo del Ferrocarril. En su momento fue un éxito de la ingeniería y hoy es una joya del patrimonio histórico ferroviario que se conserva en funcionamiento gracias a intervenciones como ésta de la que hoy se da cuenta.