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En una noche en la que la cultura tuvo el papel protagonista, el Museo del Ferrocarril de Madrid recibió más de 1.200 visitantes: una alta participación para un programa concebido por el Museo con muchas y muy variadas actividades, en el que la colaboración de las instituciones volvió a tener magníficos resultados.

Las actividades comenzaron poco después de las 20.00 h, tal como estaba previsto. Primero, las visitas guiadas. La del edificio de viajeros de la antigua estación de Delicias, en la que se completaron los grupos rápidamente, permitió conocer a fondo este impresionante exponente de la arquitectura del hierro del siglo XIX, cuya tipología fue la dominante en las estaciones de ferrocarril desde mediados de ese siglo. Simultáneamente se iniciaron otras visitas en los andenes: a los coches salón A-1 y ZZ-1102, y al coche restaurante R12-12954, comentados por los voluntarios culturales de la Confederación Española de Aulas de Tercera Edad (CEATE). De la elegancia de estos vehículos se podía pasar a otras dos visitas que explicaban la evolución de dos tipos de tracción: la de vapor y la eléctrica, dos recorridos en la historia de la tecnología ferroviaria que tuvieron como guías a miembros de la Asociación de Amigos del Ferrocarril de Madrid (AAFM).

Esto ocurría en el Museo mientras en Chamartín ya se había puesto en marcha la unidad 440-096, con todas sus plazas completas. La circulación especial programada para la Noche de los Museos consistía en un recorrido por las líneas de Cercanías desde Chamartín a Delicias en sentido contrario al de las agujas del reloj, y del mismo modo sus ocupantes pudieron viajar hacia atrás en el tiempo en la historia del transporte de Cercanías madrileño, a bordo de este automotor construido en los años setenta. A las 22.00 h se ofreció otra circulación extraordinaria, esta vez recorriendo el anillo de Cercanías en el otro sentido.

En una velada cultural no podía faltar la música. La orquesta sinfónica del Conservatorio Profesional de Música Arturo Soria interpretó composiciones de Tchaikovski, Massenet y J. de Carlos ante una audiencia muy numerosa que siguió el concierto, embelesada.

Tras el concierto se reanudaron las visitas hasta medianoche, hora de cierre, lo mismo que la proyección de audiovisuales en el Aula Talgo y el funcionamiento de las maquetas de la Sala de Modelismo.

La continua afluencia de visitantes otorgó al Museo un ambiente magnífico, en esta octava edición de la Noche Europea de los Museos, en la que han participado más de 3.000 instituciones europeas, mostrando gratis sus colecciones y ofreciendo diversas actividades especiales a los ciudadanos en un evento festivo y cultural.