Semana de la Arquitectura 2018Documentación adicional
- El Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid y la Fundación Arquitectura COAM, en colaboración con el Ayuntamiento de Madrid y la Embajada de Italia en España, celebran la XV Semana de la Arquitectura del 28 de septiembre al 7 de octubre de 2018
- El Museo del Ferrocarril participa con un programa de visitas guiadas gratuitas que permitirán conocer la historia de la estación de Delicias, sede del museo y un ejemplo de la arquitectura del hierro del siglo XIX
Madrid acoge del 28 de septiembre al 7 de octubre la XV Semana de la Arquitectura, organizada por el Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (COAM) y la Fundación Arquitectura COAM, en colaboración con el Ayuntamiento de Madrid y la Embajada de Italia. Con esta nueva edición, el objetivo principal del COAM es seguir acercando la Arquitectura y el desarrollo de la ciudad del futuro a la sociedad en su conjunto, y difundir el valioso patrimonio arquitectónico que hace de Madrid una de las capitales de referencia de esta disciplina en el mundo.
En el marco del programa de visitas guiadas a edificios históricos y peculiares con especial valor arquitectónico, el Museo del Ferrocarril se suma un año más a esta celebración y ofrece la posibilidad de conocer la historia de la estación de Delicias con visitas gratuitas que se realizarán los días 4, 5, 6 y 7 de octubre a las 11:00 y 12:00 horas. El público interesado en participar debe inscribirse previamente en la web www.semanaarquitecturamadrid.com o en la sede del COAM (C/ Hortaleza, 63)
La estación de Delicias
La nave de las Delicias fue el primero y más amplio espacio diáfano que se construyó en Madrid con una moderna estructura metálica. Posteriormente vendrían las estaciones del Norte, en 1882, y Atocha, en 1892. El proyecto de la estación fue realizado por el ingeniero francés Émile Cachelièvre, quien utilizó las más modernas técnicas constructivas que, por su parte, Henri de Dion había aplicado con gran éxito en la Galería de Máquinas de la Exposición Universal de París de 1878. La armadura de hierro se preparó en Francia, en los talleres de la compañía Fives Lille (constructora del hoy desaparecido Hipódromo de París y, posteriormente, de la estación de Orsay). La firma francesa desplazó hasta Madrid a uno de sus ingenieros, Vasaille, para montar la estación y aquí tuvo la colaboración de varios ingenieros españoles.
Construida como terminal de la nueva línea ferroviaria directa de Madrid a Ciudad Real, se inauguró el 30 de marzo de 1880 y el acto contó con la presencia del rey Alfonso XII y el presidente del Consejo de Ministros de España, Cánovas del Castillo, además de otras autoridades. Sin embargo, la estación no sería utilizada por la compañía constructora, ya que fue absorbida por la de Madrid-Zaragoza-Alicante (M.Z.A.), y como ésta contaba con sus instalaciones de Atocha vendió la estación a otra Compañía recién creada: la de Madrid-Cáceres-Portugal (M.C.P.). A partir de ese momento Delicias se convierte en la estación término de la línea funcionando como una estación con carácter internacional, ya que enlazaba dos capitales europeas, Madrid y Lisboa, con trenes directos y un tráfico mixto, dedicado tanto al transporte de mercancías como al de viajeros.
En 1928, la Compañía M.C.P. fue reconvertida en Compañía Nacional de los Ferrocarriles del Oeste de España y en 1941, al producirse la nacionalización de los ferrocarriles españoles, quedó integrada definitivamente en Renfe.
El cierre de la estación de Delicias tuvo su origen inmediato en la conclusión de los enlaces ferroviarios de Madrid y la nueva estación de Chamartín que liberó de tráfico a la estación de Atocha. Así, el 30 de junio de 1969 dejó de prestar servicio de viajeros aunque la estación permaneció en servicio hasta 1971, año de su clausura.
En 1981 se produce un acontecimiento trascendental en la historia de la estación de Delicias: la resolución de la Dirección General de Bellas Artes, Archivos y Bibliotecas por la que se acuerda tener por incoado expediente de declaración de monumento histórico-artístico a favor de la estación. Tres años después, en 1984, la estación se convertía en la sede permanente del Museo del Ferrocarril.