Pieza destacada: maqueta de la subestación eléctrica de Las Matas
- Fue restaurada hace cinco años, y recientemente se le ha incorporado iluminación led
La maqueta de la subestación eléctrica de Las Matas, que se expone desde 1984 en el Museo, formó parte en 1948 de la exposición del Centenario del Ferrocarril en España, y posteriormente fue expuesta en el antiguo museo del ferrocarril de la calle San Cosme y San Damián. Fue restaurada hace cinco años por el artesano Federico Espadas, y recientemente se le ha incorporado iluminación led, en colaboración con de los alumnos de Modelismo y Maquetas de la Escuela de Arte número 10 de la Comunidad de Madrid. La maqueta reproduce la subestación eléctrica de Las Matas en la línea de Madrid-Ávila-Segovia, la primera que Renfe electrificó, tras un proyecto iniciado en 1929 por la Compañía del Norte, pero interrumpido por la Guerra Civil.
Tramo Madrid-Cercedilla
La inauguración oficial del tramo Madrid-Cercedilla-El Escorial tuvo lugar el 26 de abril de 1944 y la subestación de Las Matas tuvo un papel emblemático, ya que el entonces jefe del Estado, Francisco Franco, hizo una parada técnica en su viaje para visitar sus instalaciones.
La función de la subestación era transformar la corriente alterna de alta tensión, que era suministrada por la central hidroeléctrica, en corriente continua con las características adecuadas para alimentar, a través de la catenaria o línea aérea de contacto, a las locomotoras eléctricas y automotores eléctricos.
Dos módulos
La maqueta se compone de dos módulos que reproducen las dos partes diferenciadas de la subestación, el puesto exterior o parque a la intemperie y el edificio de dos plantas. En el puesto exterior, pueden verse las conexiones realizadas en cobre, suspendidas de la estructura metálica mediante aisladores, destacando el transformador de potencia para rebajar la tensión trifásica a la precisa para la alimentación de las máquinas. En la planta superior del edificio se sitúa la sala de máquinas y control, donde se encuentra el cuadro de mando y dos grupos conmutatrices, cada uno formado por “máquina tierra” y “máquina línea”, cuya función es convertir la corriente recibida del transformador en corriente continua.
La maqueta fue restaurada hace cinco años por el artesano Federico Espadas, y recientemente, se le ha incorporado iluminación led, tarea realizada con la colaboración de los alumnos de Modelismo y Maquetas de la Escuela de Arte número 10 de la Comunidad de Madrid.